En Petróleos de Venezuela (PDVSA) se percibe como poco factible que el gobierno de los Estados Unidos otorgue una flexibilización o levantamiento parcial de las sanciones que le impusieron en enero de 2019 cuando se prohibió toda posibilidad de venta de crudo o combustibles en el mercado norteamericano.
Las conversaciones de México entre la administración de Nicolás Maduro y la oposición venezolana, que es una petición hecha por el gobierno de Joe Biden, genera divisiones en el chavismo y eso complica mostrar algún avance en los compromisos o concesiones que puedan aceptar. No obstante, aún así todavía se espera que el lobby o cabildeo que ha hecho Chevron pueda generar alguna medida en la licencia cuya fecha de vencimiento está fijado para el 1 de junio y de esa manera se la abra una puerta para que PDVSA le pague parte de una deuda que se calcula por el orden de los 5.000 millones de dólares.
“Todo indica que se podrá abrir un espacio para la negociación con los representantes de Chevron en Venezuela”, dijo una fuente vinculada a PDVSA. “La licencia seguramente será extendida por seis meses y si se acepta algún cambios se dejará espacio para la negociación con el gobierno del presidente Maduro y podría ocurrir que se permita a PDVSA exportar petróleo a Estados Unidos, pero solo para reducir la deuda que se tiene con Chevron por la sociedad en empresas mixtas como Petroboscán o Petropiar”, dijo una fuente de la empresa estatal.
El despacho de crudo venezolano hacia el sistema de refinación que está en la costa del Golfo de México podría reducir el déficit de oferta pero los despachos difícilmente puedan alcanzar volúmenes superiores a 150.000 barriles diarios de acuerdo a lo reportado por la fuente.
Hay consenso que cualquier flexibilización que otorgue el gobierno estadounidense será solo para favorecer a Chevron en primer lugar y a las otras cuatro empresas de servicios como Halliburton, Schlumberger, Baker Hughes y Wetherford.
Se da por descartado que a Citgo se le autorice recibir crudo venezolano y a eso se suma que por parte de la administración de Maduro tampoco hay disposición de enviar petróleo a esa filial mientras esté controlada por una directiva nombrada por la Asamblea Nacional de 2015 o gobierno interino presidido por el dirigente de Voluntad Popular Juan Guaidó.
“La única manera de que a Citgo se le envié petróleo es que nuevamente se reconozca al gobierno del presidente Maduro o que se retomen las negociaciones de México y se llegue a un acuerdo entre Gobierno y oposición”, dijo la fuente.